Cuando me mudé a Madrid sufría porque quería tener pareja. Me pasé mis primeros dos años sufriendo un desamor tras otro (lo cual me sirvió de inpiración para muchas de mis novelas). En 2018 tomé la firme decisión de ir a terapia después de «enamorarme» de un chico en 48h. A mi fvor diré que fue un viaje intenso, una historia de libro, de hecho muchas de las escenas que viví en esas 48h están en la serie A bordo.
Por muy idílico que fuese todo (o que yo lo viese) Estaba claro que tenía algún tipo de apego, aunque en aquel momento no tuviese ni ide de qué era eso.
Durante años trabajé en mí como persona, en conocerme mejor, en aceptarme y sobre todo en no depender de nadie. Llegué a imaginarme mi vida soltera y feliz. No necesitaba nada más. En mis planes ya no entraba encontrar pareja. Era suficiente con mis amigos, mi pasión y conmigo misma.
En marzo de 2023, cuando me hallaba inmersa en el proceso de escritura de mi nueva novela, conocí a mi actual pareja, en aquel momento comenzamos a vernos como amigos y fue capricho del destino que nos diéramos los teléfonos porque yo me iba una semana de retiro a escribir a una ciudad en la que él había trabajado y conoccía muy bien. Así que con la excusa de que me recomendarías sitios para comer, ir a tomar café y escribir tranquila, intercambiamos los números.
El resto es otra historia de la que quizá te hable otro día.
A lo que voy es a que muy poco de lo que aprendí trabajando en terapia con mi psicologo durante siete años me ha servido para aplicar en la relación de pareja. Por eso al poco de llevar un año con él, supe que si quería que esto funcionara teníamos que empezar una terapia de pareja.
Cada etapa y cada situación en la vida requiere unos mecanismos, unas herramientas, un aprendizaje. Y aquello que aprendí para mi crecimiento personal no me sirvió del todo par mi crecimiento en pareja, aunque no son cosas incompatibles, al contrario, todo suma.
Muchos de esos aprendizajes han interferido irremediablemente en esta obra que ya está disponible para el mundo. Desde hoy deja de ser mía para ser también tuya.
En esta obra descubrirás que el amor no es siempre como nos lo pintan, que no todo lo que pensamos que es amor lo es… o sí. Que hay amores que abrigan y otros que desgarran, amores que salvan y otros que se disfrazan de salvación para terminar hundiéndonos. Amores que llegan tarde, que se quedan cortos, que duelen más de lo que curan. Pero también, amores que despiertan, que incendian, que nos obligan a mirarnos de frente.
Y quizá, solo quizá, después de leer esta historia, ya no vuelvas a llamar amor a cualquier cosa.
Solo tú puedes sacar tus propias conclusiones, solo tú sabrás qué tipos de amores encontrarás en El despertar de la libélula y lo más importante, qué tipo de amor quieres vivir tú.
Solo hoy tienes disponible mi nueva novela a un precio reducido al 50% en digital con motivo del lanzamiento: https://amzn.eu/d/7MSS9rI
con amor,
Elsa